El ex jugador de Sportivo Belgrano, Carlos Possetto, ya se encuentra en San Francisco recuperándose de su operación de corazón en mayo pasado.
En diálogo con DSP contó cómo vivió la intervención y cómo sigue ahora en nuestra ciudad con la alta médica. Además contó que no va a poder seguir jugando al fútbol y que su vuelta al arbitraje va a tener que esperar mucho por el momento.
Possetto arrancó diciendo que “me encuentro mejor, lo peor ya pasó. Lo que sí estoy bastante dolorido en el pecho porque va a llevar un tiempo para que cierre bien la herida por dentro. Pero estoy tranquilo, acomodándome, con estudios y kinesiología”.
Sobre la operación contó que fue algo repentino ya que nunca tuvo un dolor lo que llevara a diagnosticarse de un cardiólogo. “Me di cuenta a través de un estudio que me hice donde el electrocardiograma me sale mal. Yo me seguí haciendo unos estudios y dio que tenía estenosis severa en la cual la válvula estaba casi cerrada. A raíz de eso se decidió operarme”.
El ex lateral de la “verde” manifestó que “nunca estuve asustado. Yo tengo la mala experiencia de mi papá que le pasó lo mismo y que lamentablemente el falleció. Los médicos me explicaron que en aquella época los insumos eran distintos y diferentes a los de ahora. Quizas los últimos días cuando se acercó lo operación pude estar un poco asustado pero siempre tranquilo”.

El post operatorio fue muy rápido admitió Possetto. “Desperté a las a tres horas y a los tres días ya comencé a caminar. Después me pasaron a una sala común donde estuve cinco días y regresé a San Francisco”.
Los médicos le recomendaron no volver a jugar al fútbol por precaución. “Me dijeron que deportes de contacto no haga porque me puedo llegar a golpear en la válvula y eso podría desacomodar todo. Si puedo hacer vida normal y por el momento no pienso volver a dirigir”.
El cariño de la sus compañeros
Mientras estuvo internado en Córdoba pudo recibir el apoyo de mucha gente allegada a él. Hasta fue visitado por el presidente actual de Instituto, club por el cual pasó a fines de los ’90.
“La verdad que estoy muy sorprendido y tengo que agradecerle mucho a la gente. Tanto a los que se preocuparon en San Francisco como mis ex compañeros de Instituto. Incluso el periodista Juan Pablo Estela y Oscar Dertycia me llamaron”, comentó el sanfrancisqueño.
Además agradeció a un conocido por estos lados como es el empresario Daniel Rancagno, actualmente radicado en Córdoba. “Lo que hizo Daniel es fenomenal. Me tuvo en su casa durante veinte días junto a mi hijo y me trajo a San Francisco después de la operación. Para él un afecto especial”.
Ahora solo piensa en la recuperación y el cariño de su familia. “Estoy tranquilo ahora sabiendo que lo peor ya pasó y poniendo mucha fe para seguir para adelante. Estar de nuevo en San Francisco me pone contento”.