Son primos, viven a dos cuadras en el hermoso Campo Quijano salteño, se criaron juntos, compartieron equipos, pero nunca se enfrentaron. Nico y Emi, Álvarez y Stucky estarán cara a cara en la final. “Los dos tenemos juego físico, va a ser un lindo duelo, un lindo cruce”, dijeron.
Exjugadores, planteles parecidos, uno campeón del Apertura y el otro del Clausura; los dos quieren ascender. Similitudes, cosas en común y más hay en el San Isidro-Racing de Chivilcoy que se viene en la finalísima de la Liga Argentina por un ascenso a la Liga Nacional.
Pero el caso más resonante estará dentro de la cancha, uno de rojo y el otro de celeste; son familia, levan la misma sangre. Wilfredo Nicolás Álvarez (26 años) y Norberto Emilio Sctuky (31 años) del bellísimo Campo Quijano de apenas 13.780 habitantes a jugar una final.
Son primos, compartieron dos años en Salta Basket y uno en el club que los vio nacer de Quijano, pero será la primera vez que se estén enfrentando. “Nunca nos enfrentamos con el negro, le vamos a pegar, se la vamos a hacer difícil”, comenzó la charla de Emilio en Balón Al Aire.
Los internos estarán jugando la final de Liga Argentina desde el próximo martes; los dos primeros juegos en Chivilcoy y luego la serie se trasladará a San Francisco. “Creo que va a ser muy lindo, con Nico nos criamos juntos, desde que somos chicos estamos juntos, él vive a dos cuadras de casa, poder compartir y disfrutar estas finales es único, me enorgullece por lo que fue logrando, el crecimiento que tuvo”, dijo Stucky.
Por su parte, Nicolás expresó: “Sabíamos que podía pasar el de cruzarnos, hace como dos años que no lo veo a Emilio. En San Isidro lo quieren mucho a Emi, estar acá peleando por estas cosas no creí que se me iba a dar. Somos dos equipos largos, dos equipos con potencial físico. Va a ser una linda fase de finales, las localías van a pesar muchísimo. Nunca nos enfrentamos y eso genera incertidumbre, va a ganar el equipo que este fino en los detalles”, analizó.
En cuanto al “mano a mano” que tendrán los primos, dijeron: “Tengo que tenerlo lejos del aro, aunque también está filoso de tres puntos”, tiró Nico en relación a Emi. “En la familia están chochos, es un pueblito muy chico el nuestro y mucha gente se unió al básquet y nos siguen. Se ha creado un lindo ambiente, te mandan apoyo”.
La familia es lo primero, aunque en estas finales, la prioridad de ambos parece que será otra.
