Con la Liga Nacional Femenina de Vóley parada, como todos los deportes, Lucía Miguel hace un análisis de su buena temporada hasta aquí con Villa Dora de Santa Fe.
La joven sanfrancisqueña se encuentra en nuestra ciudad tomando las medidas de aislamiento social previstas pero sin dejar de entrenar y pensando en lo que vendrá. Sueña con que la competencia siga y poder coronar con su equipo un buen año.
En cuanto como pasa estos días de parate la Miguel expresó que “desde el club principalmente y como por supuesto desde cualquier institución, nos pidieron que nos cuidemos, que tomemos todas las medidas de prevención necesarias y que seamos responsables con un hecho tan inesperado como el que está sucediendo”.
También agregó que “la mayoría de las jugadoras somos de otras ciudades, así que volvimos a nuestros domicilios para evitar cualquier preocupación”.
Villa Dora terminó primero en su grupo con tan sólo un partido perdido. “Nuestros primeros objetivos comenzaban desde la primera fase, que fue la que transitamos. Trabajamos desde el comienzo de la temporada con mucho esfuerzo y compromiso de todo el plantel haciendo un gran hincapié en la parte física para lograr quedar primeras en la zona y obtener tan buenos resultados”.
La líbero expuso que no se sorprendieron con lo que lograron hasta aquí. “Lo esperábamos porque Villa Dora siempre aspira a quedar en esta posición ya que el sistema de juego permite que los primeros de cada zona mantengan la localía”.
Sobre su experiencia personal en la Liga admite que “me siento muy cómoda y segura con el equipo. A pesar de no tener muchos minutos en cancha, valoro mucho la experiencia que estoy teniendo a través de los entrenamientos y viajes. Soy una de las jugadoras más chicas de edad, pero sin embargo me adapté muy bien al equipo. Seguir aprendiendo y mejorando en lo deportivo fue mi principal objetivo y lo estoy cumpliendo”.
La Federación Argentina de Vóley emitió un comunicado en que si el parate sigue después del 1 de abril se pondría en riesgo la continuidad de la Liga. Ante esto la joven sanfrancisqueña explicó que “una de las fortalezas del equipo es el estado físico, que con el parate nos iguala al resto. En caso de darse por terminada la competencia, entiendo que Villa Dora saldría perjudicado como institución, ya que es mucho el sacrificio económico para formar un equipo altamente competitivo y seguramente el presupuesto se arma para la totalidad de la Liga”.
También agregó que “estábamos perfilados para seguir definiendo los triangulares o cuadrangulares de local en las próximas fases y eso entiendo que lo afectaría. En lo deportivo nos afectaría a todos los equipos y nos dejaría una sensación amarga, pero a su vez entendible”.
Pero Miguel espera que la competencia siga y afirma que “salir campeonas sería cumplir el máximo objetivo y estamos preparadas. Si bien sabemos que hay equipos con el mismo objetivo y en las mismas condiciones que nosotros, como San Lorenzo y Boca, nuestras expectativas son muy altas y podemos lograrlo”.
También expresó que “esperemos que el por el bien de todos los argentinos ésta situación termine lo antes posible y sería un gran logro poder terminar de jugar la Liga Argentina”.
