No se habla de procesos, se habla exclusivamente de nombres que se tienen que poner la capa de superhéroe y salir a cambiar una torcida situación como si se tratara de algo sencillo. Los resultados, producto de muchos factores, no son los esperados en barrio Alberione y los cambios de entrenadores arrancaron más rápido de lo común.
Nadie te garantiza nada, ni mucho menos te asegura nada; en el fútbol 2+2 no siempre es 4, pero si tomamos a las mayorías, cuando no se mantiene una idea (para no escribir livianamente la palabra proyecto) las variables para fallar son aún más amplias.
¿Qué podrá cambiar Domizi en Sportivo?, fundamentalmente aplicar el llamado “golpe de efecto” en este deporte y en otros también. Algo nuevo, trabajos nuevos, mensaje nuevo para obtener partiendo desde ese punto “algo distinto”… pero de ahí a tener para este domingo o en 15 días en el Federal A un equipo que cambie considerablemente su forma de jugar, que levanten como por arte de magia el rendimiento individual… no se ilusionen, eso no se da por cambiar de apellidos en la posición de DT.
El “pájaro” tendrá que ser la línea de largada, esa que tantas veces se volvió a pisar en barrio Alberione, para luego ir transitando por un camino que tenga en el horizonte algo que buscar: un “proceso” que incorpore poco a poco conceptos para ir fortificando la idea y que esa idea te lleve a una solidez que no solo sea de dos o tres fechas, sino de un campeonato en el cual es tan largo como complicado.
Cervilla “ultra defensivo” y conflictivo en todos los ámbitos, Dell Avanzatto con extremos e interno al estilo Giaccone por un “interinato”, ahora Domizi con ideología distinta a las dos anteriores…
¿Podrá Domizi?… por el bien de Sportivo, esperemos que sí.