El viernes no será un partido más ni para San Isidro ni para Echagüe. Ambos están luchando para no ser el último de la Zona Norte que automáticamente le hará jugar una serie (con el último de la Zona Sur) para no descender al Torneo Federal.
Pero tampoco será un día más para el entrenador del conjunto entrerriano. Daniel Beltramo, el DT más exitoso en la historia del “Santo”, estará nuevamente en el otro banco de suplentes como ya la había hecho con Unión de Santa Fe. Dos ascensos con el rojo (de Provincial a Liga B y de Liga B a TNA) y la mejor campaña en TNA (tercero en 2001).
El presente es distinto porque ahora su equipo está obligado a ganar y eso le significaría a su exclub quedar verdaderamente complicado. “No es un partido común para mí enfrentar a San Isidro, desde el punto de vista emotivo porque desde que mi hijo está jugando allí no será un partido común. Me duele mucho que San Isidro este peleando ahí, porque hicimos muchas cosas para estar en el lugar que está ahora, pero eso es producto de cómo se manejan los equipos”, le dijo a DIARIOSPORTS luego del primer entrenamiento de los dos que cumplen a diario.
Beltramo llegó a Echagüe hace solo 6 partidos atrás; fue contratado por 8 fechas con la misión de lograr salvarlo del descenso: “Creo que nosotros tenemos básicamente, como en los ocho partidos que me toca dirigir, pensar en nosotros sea el rival que sea, porque no estamos en condiciones de adaptarnos al adversario sino afianzar las dos o tres cositas que quiero meter”, confesó.
No le gustan las cuentas a “pirincho”, rápidamente responde: “Tenemos que ganar los dos partidos que nos quedan”, haciendo referencia también a la visita que tendrá en Armstrong el domingo frente a Deportivo Norte.
Pero primero tiene a San Isidro, equipo al cual ya enfrentó con Unión y en varias oportunidades lo observó en el “Severo Robledo”: “San Isidro es absolutamente otro equipo sin Pais y sin González, creo que la llegada del extranjero nuevo le ha dado mucho en ofensiva, pero evidentemente en los dos extranjeros pasa mucho su juego, tienen mucho gol. Tenemos que disimular mucho nuestras debilidades y potenciar lo que tenemos que hacer bien. Si jugamos bien, le podemos dar pelea a cualquiera pero nos cuesta sostenerlo en todo el partido”, analizó.
Por último, dice estar tranquilo pese a estar en una situación límite: “Lo vivo tranquilo desde el momento que agarré un equipo en la última colocación faltando solo 8 fechas, perdiendo todos los desempates, en condiciones muy desfavorable. Estoy tratando de dar todo para sacarlo a delante, creo que mi responsabilidad tendrá que ver en estos ocho partidos. Con el correr de los años fui madurando, aprendiendo y lo tomo como un desafío”, concluyó.
