Sportivo Belgrano salió fuerte al mercado, se pudo quedar con jugadores que eran buscados por diferentes clubes de la categoría y eligieron a la verde. En nombres, el 2022 es prometedor para el equipo de barrio Alberione.
No quiere especular, el tiempo de evaluaciones y de primeros fogueos oficiales para chicos de las divisiones inferiores pasó. El 2021 Sportivo Belgrano experimentó y en el último torneo no la pasó bien, principalmente por contar con un plantel demasiado corto para una categoría sumamente exigente desde lo físico que va dejando “soldados en el camino”.
En este 2022 las exigencias son totalmente diferentes, si bien el premio del campeón es el mismo; terminar abajo en la tabla significaría perder la división, la gran diferencia con el pasado campeonato.
Por eso, y por tantas otras aristas, la verde salió al mercado con los “tapones de punta”. Fijó los ojos en nombres que parecían imposibles y antes de terminar diciembre ya los tenía con el contrato firmado. Además, tuvo el viento a favor de poder contar con el retorno de tres futbolistas clave que se encontraban a préstamos en categorías superiores.
Jorge Córdoba y Tomás Attis en la delantera. Siempre se comienza desde abajo hacia a arriba en el análisis, vale aclararlo, pero una de las principales falencias de la verde (y de innumerables equipos del Federal) fue el gol en los últimos años. La era “post-JM9” no fue para nada productiva, por eso el ex Dorados de Sinaloa y el ex Belgrano tienen curriculum como para volver a tener números que el actual presidente de la institución aseguraba por temporada.
Para colaborar con esa causa David Muller levanta la mano y dice presente. Si bien su capacidad goleadora se redujo en la estadía en Río Cuarto, el sanfrancisqueño tiene incorporado esa faceta en su juego y de estar bien físicamente será, sin dudas, una opción más que seductora. Si de los regresos se trata, además de David; Enzo Avaro y Martín Argüello son garantizados; podrán tener tardes o noches malas, pero el sacrificio por el bien del club siempre está a la orden de ellos. Los tres son refuerzos de Sportivo, eso dalo por hecho.
De las 10 incorporaciones que lleva oficializadas la institución de barrio Alberione, la defensa tuvo un común denominador: “tipos” de experiencia que conozcan lo que es ganar. Claudio Verino a la cabeza, su retorno va más allá de lo que puede aportar en un campo de juego, sabe liderar y ese es el intangible que los 90 minutos de un partido no denota. El “indio” con Lucas Márquez y Brian Flores conforman un tridente del cual no muchos querrán pasar.
Pero más allá de la calidad, Sportivo también buscó cantidad y desde allí poder tener versatilidad para que jugadores de campo sepan o puedan ocupar más de un puesto. En el arco Quinteros-Martina-Priotti, en la primera línea Pérez-Orué-Rossi como opciones de lateral derecho, Flores-Rossi-Orué (primer marcador), Verino-Márquez-Orué-Felissia (segundo marcador) y Márquez-López-Arroyo (lateral izquierdo).
Vamos al mediocampo, a la banda derecha: Avaro-López Macri-Visser pueden cumplir con esa función. Como contención y distribución Arguello-Federico-Nuñez-Maidana-Aguirre, mientras que por izquierda Muller-Visser-Avaro.
En la delantera, además de los ya nombrados Attis y Córdoba, están el propio Maximiliano Bustamante y Ezequiel Gaviglio.
Invita a ilusionarse, al menos en nombres. También es claro que el funcionamiento, en muchas ocasiones, tiende a ser más difícil de encontrar cuando hay muchas “figuras”. El primer paso Sportivo Belgrano ya lo dio, desde el 17 de enero el cuerpo técnico encabezado por Bruno Martelotto tendrá la misión del segundo.