Fue el 11 de agosto de 2008, en “el cubo” de Beijing. Andrés González salía a escena para escribir una de las páginas más importantes de la historia del deporte de San Francisco: participar en Juegos Olímpicos.
San Francisco se había paralizado por aproximadamente 7 minutos en la madrugada del 11 de agosto del año 2008, tiempo desde que Andrés González se vio en la pantalla de la transmisión oficial hasta tocar en tercera posición de su serie.
El sanfrancisqueño compitió en 200 metros mariposa registrando un tiempo 2:00.36, siendo la última participación en un Juego Olímpico de un deportista nacido en esta tierra.
“Me acuerdo que llegué bien, me pude adaptar porque estuve 12 días antes para conocer toda la rutina de los JJOO”, recordó en DSP aquella presencia en el evento más importante del planeta, en deporte de conjunto hablando, “Fue increíble vivir esa experiencia, allí se maneja con seguridad de aeropuertos, te sorprende todo lo que se vive”.
Pero antes de tener que nadar, para lo que se había preparado en toda su carrera, el entorno de la Villa Olímpica sin dudas que le será, también, inolvidable. “Una de las primeras cosas que me impactaron se dio cuando estaba esperando el colectivo que te llevaba al comedor. En ese momento aparecen Oberto, con Ginóbili y Andrés Nocioni, yo estaba con la remera de Argentina y ellos también. ´Hola, soy Manu Ginóbili´ me dijo, fue increíble”, relata entre risas, a la vez que agrega: “Con los que más estuve en contacto fue con la Selección Argentina de Básquet”.
El 11 de agosto era la fecha soñada, el momento había llegado: “Cuando me tocó entrar a nadar, la sensación más fuerte fue ver toda esa gente. Primero estaba en la sala de precompetencia, desde allí se podía ver por televisores las carreras y lo que se venía. Cuando salí a nadar al estadio, entré viendo a más de 10.000 personas, yo estaba acostumbrado a 200 o 300 en un nacional, te tiemblan un poco las piernas; pero cuando suena el silbato, uno ya sabe que tiene que hacer y para que entrenó tanto tiempo”, dice.
Andrés fue tercero en su serie, clavó los relojes en 2 minutos y 36 centésimas, batiendo su propia plusmarca nacional: “Fui el único Argentino en batir un récord nacional; ese era mi objetivo, en la natación uno compite contra uno mismo, contra el cronómetro, no contra los rivales en la pileta”.
En aquel 2008 González llevó a San Francisco por última vez a Juegos Olímpicos, algo que anteriormente lo habían logrado los ciclistas Ambrosio Aimar y Oscar Pezoa; la pechista Alicia Boscatto y el tirador Daniel Felizia.
