La entrenadora del equipo masculino de hockey de Antártida Argentina, Mónica Morgan, contó lo que fue el 2023 lleno de títulos. Además también habló de lo realizado como capitana del femenino.
Para Mónica fue un 2023 casi perfecto desde lo profesional. Logró todo como entrenadora del equipo masculino donde se quedó con el Apertura, el Clausura y el Absoluto del Torneo Integración. Como jugador consiguió por primera vez ingresar al Torneo Proyección A con las “pingüinas” y jugar con equipos de Liga A.
Morgan expresó que “fue un gran año, después de lo que nos sucedió el año pasado que no pudimos lograr el campeonato, este año fue excelente. Nos acomodamos a un nuevo formato de torneo, con nuevos equipos y pudimos ver como estábamos parados ante esos nuevos rivales. El nivel nuestro fue muy alto, perdimos puntos sólo en el Apertura que empatamos con Alma Juniors, y después fueron todos triunfos”.
Agregó que “pudimos afianzar un equipo de hace un par de años con algunas incorporaciones de chicos que venían de Charabones. Teníamos una gran base de trece jugadores que venían trabajando juntos desde hace varios años. Se consolidó un buen funcionamiento aunque tenemos jugadores que por sí solos y sus capacidades individuales te pueden desequilibrar un partido si es que el equipo tiene un mal día. El sumar chicos nuevos nos hizo mejorar la competitividad para saber quién está mejor para un puesto”.
Algo que generalmente se da al revés le toca a Mónica, ser entrenadora de un grupo de varones. “Al principio era raro, tenía a Marcos (Medina) y Matías (Astegiano) que son grandes jugadores que jugaron mucho tiempo en Córdoba, y era raro tener que darles indicaciones a ellos. Ahora ya es normal, incluso coincidimos en algunas cosas y otras ellos tratan de colaborar con conceptos desde adentro de la cancha hablando con un jugador en particular”.
Sobre esto también manifestó que “hoy tengo una relación muy buena con todos y ya soy una más de ellos. Es positivo tener una buena relación, si bien por ahí existen conflictos a veces entre jugadores en situaciones de partidos, pero hay que saber tratarlos. El hombre es distinto a la mujer, y quizás una discusión adentro de la cancha, afuera termina en nada”.
Pensando en el 2024 se sabe que la vara quedó muy alta y motivar de nuevo a jugadores que lo ganaron todo es complicado. “Es muy difícil, nosotros estamos en una zona muy tranquila y deberíamos pasar a jugar otro estilo de torneo para salir de la zona de confort. Si volvemos a jugar el Torneo Integración debemos apuntar otra vez a lo más alto, no podes apostar a menos. Hay una idea de parte de FOSH de poder jugar el Torneo Dos Orillas con equipos de Santa Fe y Paraná que es más alta la competencia, no hay nada resuelto”.
Su análisis como jugadora
Mónica es la capitana del equipo femenino que por primera vez se metió en el Torneo Proyección A y disputó partidos con equipos de la Liga A.
“Para nosotras fue un gran año, del año pasado que quedamos en la puerta y nos tocó salir campeonas del Promoción, el objetivo ahora era clasificar al Proyección A. Se lo logró y se jugó contra equipos de la A, en donde hicimos buenos partidos y por ahí no se nos dieron los resultados. Arrancamos ganando con Universitario y después se nos escaparon partidos insólitos”, argumentó Morgan.
Antártida fue el único que le ganó a Urú Curé en el Proyección algo que demuestra que el nivel era alto. “Fue el único que perdieron ellas, allá les habíamos hecho un buen partido más allá del resultado final. Fue un grandísimo año para nosotras”.
No le queda la espina de no haber luchado hasta el final por el ascenso. “Estábamos en el Proyección A pero creo que nunca tuvimos en la cabeza el ascenso. Es como que con el pasar de los partidos y que se nos iba complicando no lo pensamos”.
Se sabe que el femenino de Antártida está partido en dos con chicas que entrenan en San Francisco y otras en Córdoba por sus estudios. “Es nuestra realidad pero entrenando así obtuvimos grandes resultados, no hay que despreciarlo. Hay una camada que hace varios años viene jugando juntas y se conocen muy bien adentro de la cancha. Este año nos sirvió de experiencia, seguro hay cosas para seguir mejorando, no sólo en el juego sino también en infraestructura, en cantidad de chicas por categoría”.
Por último dijo que “esto es un proceso de años que venimos logrando cosas. Hemos logrado el ascenso de la C a la B2, luego de la B2 a la B1 y ahora nos queda ese pequeño salto de tener una experiencia en la A. Ya tenemos experiencia de jugar con cuatro equipos de la A que nos sirvió para ver el ritmo que tienen, aunque sean los cuatro peores de la A. Queremos aspirar a lo mismo y clasificar al Proyección A”.