No ponen excusas, se arremanga y siguen trabajando. A la vez que sostienen los gastos en momentos complicados, también se animan y continúan ejecutando los proyectos que tienen en carpeta. Ahora realizaron una inversión cercana a los 250.000 pesos para que el driving luzca como los mejores clubes del país.
La prolijidad comienza a notarse ni bien uno se desvía de calle Primeros Colonizadores para ingresar al predio del Jockey Club San Francisco. Desde allí el campo de golf abre el panorama visual, ni el frío lo obliga a desprenderse del verde, ni tampoco el otoño arrasó con las hojas de su vegetación de más de 70 años.
Al estacionar el vehículo y descender del mismo se sigue observando orden, también continuos trabajos, ya sean de rutina, como planificados con antelación. Allí el Driving tomó un papel preponderante durante estos meses de pandemia; el “parate” le dio el respiro suficiente para rejuvenecer su suelo, pero ni bien la mano de obra tuvo el ok para trabajar, llevó a impulsar una nueva edificación.
El driving, o sector de entrenamientos y perfeccionamiento, luce con tres gateras totalmente techadas y próximas a ser cubiertas. “Siempre queremos darles las condiciones a los socios, al profesional del club para que brinde sus clases, por eso la idea es mejorar las instalaciones”, comenzó la charla el presidente de la subcomisión de golf, Ariel Morano.
“Hace seis años atrás contábamos con mediasombra y una estructura que fue arrasada por las tormentas fuertes; siempre por una u otra tarea se fue postergando y este año le dimos prioridad. La obra fue coordinada por Franco Ronconi y siempre con la observación de Lucas Milanesio que es el capitán de cancha”, continúa contándole a DIARIOSPORTS, mientras señala y explica la obra.
“Primero construimos el piso y luego el techo que sirve de reparo. Estas tres gateras están cubiertas y con el correr del tiempo serán cerradas en su totalidad. Es siempre lindo disponer de un sector de entrenamiento acorde, con comodidades y la siempre presencia de Matías Amiune, profesional del club”.
A las tres cubiertas, se le agregan seis espacios disponibles para que los golfistas puedan ocupar. Pero no se quedan allí: “Ahora tenemos pensando ampliar para el sector derecho y establecer allí nuevos lugares para tener mayor superficie porque estamos creciendo en socios y entusiasmados en tomar clases”, dice Morano.
“Este año se nos truncaron varios torneos importantes por el Covid, pero seguimos trabajando con el apoyo de los socios y de los sponsors que no nos han soltado la mano. Esta obra llevó a tener que hacer un esfuerzo muy grande, hemos invertido cerca de 250.000 pesos con parte de la cuota societaria y el aporte de privados. Somos un club igual que cualquier otro, trabajamos día a día, pero siempre con la colaboración de los socios, empresas privadas y las entidades gubernamentales, porque esa es la única forma de mantener estás 16 hectáreas en excelentes condiciones”, concluyó.
