Luego de 10 días de descanso, el plantel de San Isidro retomó los entrenamientos a menos de un mes para el inicio de la final por el ascenso. Porta recupera jugadores y se perfila para lo que será una serie histórica.
¿El objetivo?, la final por el ascenso. ¿Cuándo?, el 27 y 29 de mayo los primeros dos partidos. ¿Dónde?, aún con lugar y rival a esperar cuando se conozca al campeón del Clausura de Liga Argentina.
Para todo eso, San Isidro volvió este lunes en su estadio a los entrenamientos luego de la eliminación que sufrió ante Sportivo Suardi en semifinales de Conferencia Norte. El equipo de Sebastián Porta tendrá prácticamente un mes para alistarse de la mejor manera, sabiendo que se encuentra a tres victorias de la máxima categoría del básquet argentino.
Las buenas noticias por calle Corrientes fueron las presencias de Nicolás Álvarez y Jerónimo Suñé. El interno salteño ya entrenando con normalidad a la par de sus compañeros luego del problema sufrido en uno de sus tobillos.
El perimetral santafesino continúa recuperándose de una fisura en el codo derecho, perro ya arrancó con trabajos en cancha con técnica individual. Suñé tendrá toda esta semana para seguir avanzando en su rehabilitación y en Sani son optimistas en que llegará en óptimas condiciones a la finalísima.
San Isidro continuará toda esta semana entrenando, la próxima viajará a Santa Fe para jugar un amistoso el jueves 8 con Unión con el fin de poder estar en ritmo de competencia.
