Es la única cancha de este deporte en San Francisco, comenzó de a poco a sumar adeptos y en la actualidad el crecimiento en el Club San Isidro es notorio. El squash está considerado el deporte más completo que puede realizar un deportista amateur.
Actividad física y diversión en un mismo deporte, dos cualidades tan atractivas como útiles para encontrar la motivación necesaria para animarse a practicar el squash, un deporte considerado de raqueta que se juega bajo techo en un espacio perfectamente delimitado: 9,75 metros de largo, 6,40 metros de ancho, y una pared frontal con una altura de 4,57 metros.
En San Francisco, el Club San Isidro construyó la denominada “Catedral” hace algunos años atrás. Se encuentra dentro del predio “Alejandro Aimaretti” de avenida 9 de Septiembre y diario los turnos están siendo solicitados por los adeptos de siempre al squash, pero también empiezan a volcarse al deporte amateur que también practican tenis o pádel.
El squash es de los deportes más completos, ya que se ejercita todo el cuerpo; además, en poco tiempo se realiza una gran actividad física y requiere distintas destrezas como, por ejemplo, el control de bola, el nivel físico, o la atención. Juan Pablo Pramparo es el principal referente de este en la ciudad, en la provincia y también a nivel país. El sanfrancisqueño llegó a ganar el “Córdoba Cuna de Campeones” en 2016, entre otros galardones.
Si bien la pandemia frenó la vorágine de torneos, en San Isidro se realizaron campeonatos organizados por la Asociación Cordobesa de Squash, entidad que nuclea a jugadores de esta disciplina.
Cómo se juega al squash
El squash consiste en que los dos adversarios han de golpear la pelota con sus raquetas alternativamente, teniendo que rebotar la bola siempre en la pared frontal por encima de una banda frontal, aunque se permite golpear en las otras paredes del cubículo sin problema, siempre que antes o después se golpee la frontal. El saque se debe hacer alto y debe golpear el recuadro entre las líneas a tres cuartos de la pared y las líneas más altas marcadas, si choca contra cualquier otra zona será considerado como falta.
El punto o stroke se considera ganado cuando el oponente no es capaz de devolver la pelota tras haber picado más de una vez, o cuando no ha podido conseguir golpear la bola contra la pared frontal. El jugador que tiene el saque, al perder un tanto, debe dejar este privilegio al contrario, de lo contrario mantiene siempre el saque. El que gana el set es el que comienza sacando en el siguiente.
Los partidos de squash se juegan al mejor de tres o cinco sets, y cada uno consta de 11 puntos o rallies, que se suman dependiendo de la modalidad (siempre se debe ganar por dos puntos o más, por lo que se pueden dar sets con más de 11 puntos).