El entrenador de Antártida Argentina, Matías Garetto, aguarda por la vuelta a las actividades para poder afrontar su primera experiencia como DT en la Primera de las “pingüinas”.
En diálogo con DSP, contó que sigue en contacto con todo el plantel y que espera una confirmación de la Federación Cordobesa de Hockey. Además analizó la posibilidad de que el torneo cambie de formato si comienza en el segundo semestre.
Corren los días en cuarentena y Garetto reconoce que parecen más días de los que realmente pasaron. “Hace un mes que estamos en este proceso de inactividad pero parece que fue mucho más tiempo. Nosotros seguimos trabajando desde casa, seguimos planificando entrenamientos y estamos atentos en lo que pueda salir en los boletines de la Federación”.
El contacto con el plantel es diario ya que no quiere que aflojen a esta altura. “Con las chicas estamos en contacto vía whatsapp, atentos a las necesidades que puedan tener. Tratamos de sobrellevar con algunos trabajos físicos que les enviamos para que se sigan moviendo durante este parate”.
Aún no tienen noticias de cuándo podrán volver a la actividad, ni muchos menos como se va a afrontar la Liga B1. “La incertidumbre es enorme, como cuerpo técnico estamos constantemente averiguando que va a suceder. Porque no es lo mismo que nosotros les mandemos ejercicios a las chicas, a poder supervisar las actividades personalmente”.
A pesar de la incertidumbre Garettó asume que “creo que se va a jugar el torneo. Va arrancar pero me parece que viene para largo esto. Todos los clubes estamos con la misma postura de que cuando esto se reanude tener un período de adaptación porque todo el trabajo de pretemporada que hicimos se ve altamente afectado con este parate”.
Sobre lo que pueda suceder y haciendo futurología, el DT espera para cambiar. “Seguramente esto arrancará después de las vacaciones de invierno. El torneo va a ser mucho más corto, dependiendo también del formato que le dé la Federación. También veremos si se mantienen los ascensos y descensos o será un torneo de transición”.
Agregó que “cambia mucho porque si hubiese comenzado en circunstancias normales, tenemos todo el año para corregir errores técnicas como tácticas. Al ser más corto va a depender del carácter que le quiera dar la Federación. Vamos a tener que trabajar mucho sobre la marcha y el margen de error va a ser menor”.
En su primera experiencia como entrenador de Primera tuvo que afrontar este gran parate inesperado. “Uno se venía preparando pero de repente nos encontramos con este panorama. Tengo sensaciones encontradas, teníamos una gran ilusión y expectativa de arrancar en Primera división y hacer mis primeras armas. Yo creo en la causalidades así que todo será por una causa”.
Además expresó que “ahora hay que cambiar el panorama, aunque las metas y los objetivos siguen siendo los mismos pero con otros tiempos de ejecución. Hay que estar preparado para afrontar la situación. Me duele un poco porque el debut iba a ser por primera vez de local, pero seguimos con las mismas ganas, las mismas ilusiones y con tranquilidad”.